La Axarquía (Málaga): la otra Costa del Sol

Balcón de Europa

Balcón de Europa, los ojos y el corazón de Nerja, su mejor mirador y punto del que irradian sus viejas calles.

Nerja, la patria de Chanquete, es la puerta de una comarca montuosa de raigambre morisca, llena de curvas y viñedos, de secaderos donde la uva moscatel se hace dulce pasa y de pueblos blanquísimos que conservan casi intactos sus viejos minaretes. La ruta que proponemos es solo un aperitivo, un garbeíllo por media docena de los 31 municipios que forman La Axarquía, los más turísticos. Nada que ver, en todo caso, con la otra Costa del Sol, la de los campos de golf.

Mucho ha cambiado Nerja desde que se grabó Verano azul. Chanquete lo tendría ahora crudo para plantar su casa-barco en esta población de 22.000 habitantes (el doble que en 1981, cuando se emitió la serie), como no fuera en una rotonda. Pero aún así, ha cambiado menos (o menos mal) que otros lugares de la costa malagueña. Lo mejor de Nerja sigue igual, que es su emplazamiento al borde de un acantilado, con miradores aquí y allá para embobarse contemplando lontananzas marinas, verdes montañas y diez playas donde, antes de que lleguen los bañistas más madrugadores, los pescadores varan sus barcas y rematan las rayas a mazazos, por si las chispas. El Parador es un buen mirador, pero el número uno es el Balcón de Europa, una punta que sobresale entre las playas del Salón y de Calahonda y que, además de los ojos de Nerja, es su corazón, el centro bullicioso del que irradian las calles del casco histórico. Los contados días que el tiempo no invita a tumbarse en una playa o a pasear de mirador en mirador, la gente se entretiene visitando la Cueva de Nerja, en la pedanía de Maro. Por cierto, que una de las posibilidades que ofrecen los gestores de la cueva es recorrerla en compañía de Miguel Joven, el niño (ahora, de 40 tacos) que hacía de Tito en Verano azul, uno de cuyos episodios (conviene recordarlo, porque han pasado mil años) se desarrollaba en su interior. Esto de que un famoso de hace mucho (pero mucho) se gane la vida enseñando una cueva prehistórica nos parece algo muy apropiado. Casi tanto como si la enseñara uno de los hombres del Paleolítico que la llenaron de pinturas (589, para ser exactos).

Nerja y Frigiliana

Pescador de Nerja con una raya recién rematada a mazazos en la playa y típico callejón moruno de Frigiliana.

A siete kilómetros de Nerja, en las faldas de la sierra Almijara, relumbra la cal de Frigiliana, que fue uno de los últimos reductos de los moriscos sublevados en Granada. La historia de la batalla del Peñón de Frigiliana, que supuso el exterminio de la mitad de la población y la expulsión del resto, se cuenta en 12 artísticos paneles de azulejos que hay colocados en diversos rincones del barrio morisco. Hasta lo triste se hace bonito en Frigiliana, que sin duda es el pueblo más bello de la Axarquía, con sus casas radiantes, sus costanillas escalonadas, sus callejones sin salida, sus arcos, sus pasadizos y sus macetas de geranios en cada ventana, en cada balcón, es cada poyo, en cada peldaño, en cada esquina… En muchas casas, las mejor restauradas, se advierte la mano adinerada de los ingleses, que son un millar, la tercera parte de la población. A estos no se les expulsará, no.

De Frigiliana a Torrox hay 14 kilómetros de curvas por la carretera MA-9012 y otros 14 de Torrox a Cómpeta por la A-7207. Rectas, ni una. Si nos mareamos, que es muy probable, podemos parar en algún apartadero con la excusa de admirar este curioso paisaje: montes completamente nevados de blancas casas de labor con sus respectivos paseros, terrazas rectangulares donde los racimos de uva moscatel se secan al sol. El vino de Cómpeta es famoso. Luego podemos bajar de nuevo a la costa por Sayalonga y Algarrobo o dar un rodeo mayor por Árchez y Arenas, encantadores pueblos morunos que conservan sus viejos minaretes, sin más añadidura que un par de campanas cristianas.

Cómpeta

El caserío blanco de Cómpeta se apiña alrededor de la torre de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.

Cómo ir. La Axarquía se halla en el extremo oriental de Málaga, lindando con Granada. De Málaga a Nerja hay 53 kilómetros yendo por la autovía A-7. Y de Nerja a Arenas, pasando por Frigiliana, Torrox, Cómpeta y Árchez, 51 kilómetros. Dormir. Hay infinidad de hoteles en esta zona de Málaga. Solo en Nerja tenemos más de 100 opciones para alojarnos. El Parador de Nerja es nuestra primera recomendación: un lujazo, sus terrazas abiertas al mar; en el restaurante, no hay que dejar de probar la fritura de pescaíto. Si preferimos dormir tierra adentro, una alternativa es El Balcón, en Cómpeta, que tiene vistas, jardín, piscina y restaurante económico. Comer. Cortijo Paco (Cómpeta; 952 553 647): cocina de temporada con productos de la tierra. Más información. Turismo de Málaga.

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